La rutina del día a día puede resultar agotadora. El trabajo, los niños, la casa, el tráfico… ¿Quién no ha soñado, alguna vez, con poder desaparecer tan solo activando un botón? ¿Te ha pasado alguna vez? Si la respuesta es sí, te recomiendo que sigas leyendo este post en el que hemos recopilado, para ti, los mejores lugares aislados del mundo.
Oymyakon
Oymyakon es una localidad rusa situada al este de Siberia. Por su localización, las temperaturas que puedes encontrar son bastante extremas. La media anual se sitúa alrededor de los -49 º, siendo el mínimo histórico de – 68 º. Sin embargo, en contra de lo que pueda parecer, hay vida en este lugar. La población de Oymyako, aunque no llega a los 500 habitantes, es un ejemplo de que se puede vivir a esas temperaturas. Desde luego, es un lugar al que nadie iría a buscarte.
Qué ver
Uno de los atractivos de Oymyakon es el clima en sí mismo. Las bajas temperaturas invitan a vivir una experiencia única. Pero, además, esas mismas temperaturas crean un paisaje digno de ver. La nieve y la niebla lo cubren absolutamente todo.
Como curiosidad, si decides perderte en Oymyakon; existe una tradición, seguramente provocada por la situación extrema en la que se vive allí, que consiste en hacer una ofrenda de comida a la naturaleza. Con un coche, hay que alejarse de la civilización y depositar en el suelo del campo un pedazo de comida para nutrir a la naturaleza y que ella te nutra a ti. No puedes dejar de hacerlo si vas. Además el turismo es tan raro en ese lugar del mundo que los lugareños velarán para que cumplas con la Madre Tierra. No te sorprendas tampoco si acabas saliendo en la prensa local.
Cómo llegar
El aeropuerto más cercano es el de Ust-Nera, al que se llega tras varios transbordos. A partir de ahí, el resto del viaje se realiza por carretera en microbús.
Tristan da Cunha
Este archipiélago se encuentra en mitad del Atlántico. Está considerado como el lugar habitado más remoto de la tierra, y es que el rastro civilización más cercano a esta isla está a más de 1500 km de distancia.
En Tristan da Cunha viven unas 270 personas y no hay un solo hotel dónde alojarse. Si decides perderte en este lugar tendrás que trabajar la tierra a cambio de techo y comida. Es lo que tiene planear viajes a larga distancia.
Qué ver
La propia experiencia de vivir tan apartado de la civilización y rodeado de agua ya es, en sí, un atractivo de esta isla. Además, el paisaje y el contacto directo con la naturaleza hacen de esta isla un lugar mágico. Otro de los atractivos es el volcán Queen Mary, cuya última erupción fue registrada en 1961.
Cómo llegar
Tristan Da Cunha es, como ya hemos dicho, una isla perdida en mitad del Atlántico, aun así, no es tan complicado llegar a ella. Existen varias compañías de cruceros trasatlánticos que tienen en esta isla una parada establecida. Para viajar por tu cuenta debes llegar hasta Ciudad del Cabo y coger allí una de las embarcaciones que periódicamente salen hacia la isla.
Las islas Pitcairn
Del Atlántico nos vamos ahora al Pacífico. Las islas Pitcairn, en la Polinesia, no están tan lejos de la civilización pero sí están, prácticamente, deshabitadas. En la actualidad 50 personas viven allí, así que tampoco aquí encontrarás hoteles escondidos por ningún sitio.
Qué ver
Las islas Pitcairn son un trocito de paraíso en la tierra. Su clima tropical hace de este lugar un magnífico destino vacacional para aquellos que se quieran perder. La isla cuenta con numerosas rutas para hacer senderismo y multitud de actividades, incluidos los paseos con Quad. A pesar de estar rodeada de agua, la isla solo cuenta con una playa dónde poder tumbarse al sol.
Cómo llegar
Para poder viajar a las Las islas Pitcairn, el primer paso es ponerse en contacto con el Consejo de la Isla y con el gobernador y pedir una solicitud. Para que esta sea aprobada debes tener alguna habilidad que se útil para la comunidad, es el único requisito que se pide para poder pasar unos días en Las islas Pitcairn.
Son pocas las compañías aéreas que viajan hasta estas islas y van entrando y saliendo nuevas cada año. Lo mejor es que te pongas en contacto el Gobierno británico y ellos te darán toda la información acerca del viaje y de los papeles que necesitas para poder entrar.
Barrow
Nuestro siguiente destino es Barrow, en Alaska. Esta localidad tiene el honor de ser el asentamiento más septentrional del continente americano.
Qué ver
Posiblemente lo más curioso de Barrow es que cuando llega noviembre, el sol se pone y no vuelve a salir hasta enero. O lo que es lo mismo, en Barrow tienen una noche que dura más de 60 días. Solamente por vivir esta experiencia ya merece la pena trasladarse hasta allí. Por lo demás, no es un sitio tan despoblado como hemos visto anteriormente, en esta localidad norteamericana viven alrededor de 4300 personas y es un sitio totalmente civilizado.
Hay muchas cosas que se pueden visitar en Barrow aunque, quizá, la más llamativa sea la Abadía de Furness. Actualmente solo quedan las ruinas, aun así, es un lugar en el que se respira la paz en la que, en su día, vivieron allí los monjes.
Cómo llegar
Al ser un lugar civilizado, llegar es más sencillo que en otros lugares más remotos. Lo primero es viajar hasta Alaska, lo cual no tiene ningún misterio ya que, una vez en Estados Unidos, son muchas las compañías que van hasta allí. Una vez en Alaska puedes llegar hasta Barrow por aire o por tierra, es cuestión de elegir lo que más te apetezca. Multitud de medios de transporte llegan hasta allí, por lo que no es complicado encontrar una combinación que se avenga a tus exigencias. Incluso, una vez en Estados Unidos, puedes llegar allí en coche de alquiler. Una buena opción para poder moverte libremente después.
Viajar a este tipo de lugares no está al alcance de cualquier viajero, has de ser un auténtico aventurero y apreciar la belleza escondida en cada rincón. ¿Te atreves?